El nuevo ministro de Defensa de Colombia estará a cargo de reformar las fuerzas de seguridad y combatir la corrupción en medio de una gran crisis.
El exmagistrado de la Corte Suprema Iván Velásquez reemplazará al ministro de Defensa, Diego Molano, el 7 de agosto, anunció el viernes el presidente electo Gustavo Petro.
Molano dejará a Velásquez con una gran crisis de seguridad y Petro ha prometido reformas de gran alcance que permitirían una “paz total” en Colombia.
El nuevo ministro de Defensa tendrá que gestionar muchas cosas a la vez.
Reforma de las fuerzas de seguridad
La primera tarea de Velásquez será reemplazar el liderazgo de las fuerzas de seguridad para asegurar su lealtad al nuevo presidente.
Esta purga también tendría que erradicar la corrupción entre los líderes militares denunciada por Petro durante la campaña.
Al menos 10 generales y muchas decenas de comandantes de menor rango han estado implicados en escándalos de corrupción desde que el presidente Iván Duque asumió el cargo en 2018.
Reforma policial
Petro se comprometió a separar la Policía Nacional del Ministerio de Defensa como lo recomendó la comisión de derechos humanos de la Organización de los Estados Americanos.
La Policía Nacional ha sido parte de las fuerzas armadas desde un golpe militar en 1953.
Velásquez tendrá que coordinar el traslado de la Policía Nacional a un ministerio que aún no se ha creado.
La separación de la Policía Nacional de las fuerzas armadas puede requerir una nueva doctrina militar, que actualmente incluye a la policía.
Desmantelamiento de grupos armados ilegales
Velásquez también jugará un papel importante en la formulación de políticas públicas que permitan el desmantelamiento de los grupos armados ilegales y sus redes de apoyo.
La creación de estas políticas públicas son parte de un acuerdo de paz de 2016 con el ahora desaparecido grupo guerrillero FARC, que ha sido ignorado por el presidente Iván Duque.
Esta reforma requerirá la colaboración del Ministerio de Justicia y la Fiscalía General de la Nación, y finalmente será aprobada por el Congreso y la Corte Constitucional.
Conflictos armados y crisis de seguridad
Los grupos armados ilegales que Petro espera desmantelar son en gran parte responsables de la actual crisis de seguridad, particularmente en el campo de Colombia.
El grupo guerrillero ELN y la organización paramilitar AGC han estado en guerra en la región del Pacífico de Colombia desde 2019.
Grupos formados por disidentes de las FARC están en guerra con el ELN en la frontera con Venezuela y aterrorizando a las comunidades rurales del sur de Colombia.
Petro ya anunció que retomará los diálogos de paz con el ELN y sugirió que también buscará algún tipo de salida negociada con los demás grupos armados ilegales.
Esto supondrá un gran desafío para el Ejército Nacional, que deberá mejorar la situación de seguridad al mismo tiempo que facilita los diálogos de paz.